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¿En qué semana puedo saber el sexo del bebé?

¿En qué semana puedo saber el sexo del bebé?

¿En qué semana puedo saber el sexo del bebé?

Una de las preguntas más comunes que podemos hacernos es “¿cuándo puedo saber el sexo del bebé?”, no importa si somos los futuros padres o se trata de alguien cercano, saber el género del bebé causa ilusión.

Quizá porque es el banderazo de salida para comenzar a comprar ropita o accesorios o porque comienza el debate de cómo se llamará… Si bien, existen las parejas que lo dejan para sorpresa hasta el momento del parto, la mayoría de las parejas esperan el momento con ansias para poder imaginar con más certeza cómo será su hija o hijo.

¡Por eso queremos explicarte cuándo podrás saber si es niño o niña! 

Para comenzar a hablar del tema, primero debemos explicar que, es el papá el que aporta el elemento necesario para definir el género del bebé. ¡Es el espermatozoide el que tiene este importante papel!. El sexo femenino está compuesto por un doble cromosoma (también llamado zigoto) XX, mientras que el del hombre es XY.

De este modo, el óvulo siempre es cromosoma X y el espermatozoide es el que tiene la posibilidad de hacer la diferencia pues puede ser X o Y. Si el óvulo recibe un espermatozoide X, forman un zigoto XX, es decir, el bebé será mujer. Por otro lado, si el esperma que fecunda al óvulo es Y, el bebé será hombre al formar un zigoto XY. Los espermatozoides con carga genética Y son más ágiles, es decir, se mueven más rápido aunque son más pequeños y viven menos.

En cuanto los espermatozoides con carga X son más resistentes y grandes aunque son más lentos. En conclusión, es en la concepción, con esta unión de cromosomas cuando se define el sexo del bebé, pero no será revelado hasta unas semanas después. Es importante que, cada que acudas con tu doctor, le preguntes todas las inquietudes que tienes en la cabeza, como la semana ideal para saber el sexo o cómo puedes mantenerte saludable en tu embarazo.

¿Cuándo puedo saber el sexo del bebé?

Desde la fecundación el sexo está determinado, pero es hasta la semana 8 en que los órganos sexuales del bebé comienzan a desarrollarse. Esto no implica que ya puedan ser visibles y que el médico los pueda identificar, se necesita algo de tiempo y paciencia para no dar una noticia falsa.

De hecho, un documento (https://www.imss.gob.mx/salud-en-linea/infografias/desarrollo-bebe) del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) explica que es hasta el tercer mes que “se diferencian los órganos sexuales”. Es en la semana 18 de embarazo que los órganos sexuales están lo suficientemente desarrollados para notar si será niño o niña. 

Esto se logra mediante un estudio, llamado ecografía o ultrasonido, un estudio no invasivo que produce imágenes del interior de la pancita de mamá. En este, se podrá apreciar en el área genital la existencia de bolsas escrotales.

Si estas bolsitas se perciben, se está hablando de que el bebé será varón, pero, si a pesar de que el bebé se deja ver, no se distinguen los órganos masculinos, se trata de la llegada de una niña. En algunos casos se pueden apreciar los labios mayores.

Cuando se trata de un embarazo múltiple, se necesita que ambos bebés, o al menos uno, esté en una posición adecuada para que se pueda visualizar su zona genital. Suele complicarse debido a que los bebés están apretaditos y en posturas más complejas.

https://www.mustela.com.mx/es/mustela-junto-a-ti

 

Si el bebé no se deja ver…

Suele suceder que el bebé no se deja ver si es niño o niña, debido a la posición que tiene en el momento en que se visita al médico o porque tiene entre las piernas el cordón umbilical. Si esto ocurre, el médico puede sugerir esperar hasta la semana 20 o 22 para realizar otra ecografía y tener éxito.

Otras pruebas…

Existen otras pruebas que pueden ayudar a que se sepa el sexo, sin embargo, son elaboradas para descartar enfermedades del bebé, por lo que no están recomendadas sólo para saber su género. Una es la amniocentesis, un estudio invasivo que consiste en la extracción de una muestra de líquido amniótico del bebé con la punción de una aguja delgada a través del abdomen hasta la bolsa amniótica.

Se hace con la finalidad de analizar los cromosomas y descartar posibles enfermedades. Suele realizarse entre las semanas 16 a 22. Por otro lado está una prueba de sangre de la mamá que se realiza a partir de la semana 8.

Este método es usado para descartar enfermedades genéticas. A pesar de no ser tan invasiva como la amniocentesis, no es una opción recurrente ni recomendada para conocer el sexo del bebé.

También existen las pruebas de orina de las farmacias, pero sus resultados no son tan confiables. Es importante recalcar que la ecografía o ultrasonido a partir de la semana 18 es el método más recomendable para saber el sexo del bebé.