Bebé recién nacido y su cordón umbilical: guía experta para cuidarlo con seguridad
La Dra. Orly Cheirif, pediatra y neonatóloga, comparte los consejos esenciales para cuidar el ombligo de tu bebé
En cuanto nace tu bebé, el primer vínculo físico que lo conectó contigo —el cordón umbilical— se transforma en algo más: un muñón que necesita cuidado, observación y mucho amor. Es normal que, como mamá o papá, sientas algo de nervios al tocarlo, limpiarlo o simplemente verlo. Por eso, en Mustela, nos aliamos con la Dra. Orly Cheirif, pediatra y neonatóloga, para responder tus dudas más frecuentes sobre este tema y ayudarte a cuidar el ombligo de tu bebé recién nacido con confianza, información y calma.
¿Qué es el muñón umbilical y por qué es tan importante?
Al cortar el cordón umbilical tras el nacimiento, queda un pequeño resto: el muñón umbilical. Este tejido se va secando, oscureciendo y, eventualmente, se cae por sí solo. Es parte de las primeras etapas del cordón umbilical y del proceso natural de adaptación del cuerpo del bebé fuera del útero. Cuidarlo no solo ayuda a prevenir infecciones, sino que también te conecta con una rutina diaria de cuidado, tacto y observación.
Etapas del cordón umbilical: ¿qué esperar?
Durante los primeros días, el muñón umbilical es húmedo y blanco grisáceo. Poco a poco, se seca y toma un tono marrón o negro. Se va encogiendo hasta desprenderse por sí solo. Este proceso suele durar entre 5 y 15 días, aunque algunos bebés tardan más.
¿A los cuántos días se cae el ombligo del bebé?
La mayoría de los bebés pierden el cordón umbilical entre el día 5 y el 15 después del nacimiento. No obstante, es completamente normal que se tarde hasta 21 días. Si han pasado más de 3 semanas, conviene consultar con el pediatra, especialmente si hay mal olor, pus o enrojecimiento.
21 días y no se cae el cordón umbilical: ¿es normal?
Sí, pero con matices. Si han pasado 21 días y el cordón sigue adherido, pero no hay signos de infección ni inflamación, puede tratarse de una variación normal. Sin embargo, si el ombligo presenta olor fuerte, secreción, pus o se ve rojo, es importante que lo revise un profesional de la salud.
¿Cómo saber si el cordón umbilical está sano o curando bien?
Un cordón umbilical sano se ve seco, se oscurece con el paso de los días y no huele mal. Puede haber una ligera costra o un pequeño sangrado justo cuando se cae. Lo que no debe haber es pus, olor desagradable, enrojecimiento alrededor del ombligo o dolor al tocarlo. Estos serían signos de alerta.
¿Cuándo debo preocuparme por el cordón umbilical del bebé?
Consulta al pediatra si:
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El ombligo huele mal o supura pus
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El área está roja, caliente o inflamada
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El muñón sangra constantemente
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Tu bebé llora o se queja al tocarlo
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Pasan más de 21 días sin que se caiga
Cualquier cambio fuera de lo común debe evaluarse para descartar un cordón umbilical infectado.
¿Cómo identificar una infección en el ombligo del bebé?
Algunos signos claros de infección incluyen:
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Pus amarillo o verdoso
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Olor desagradable
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Enrojecimiento o hinchazón alrededor del ombligo
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Fiebre o malestar general
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Dolor evidente al tacto
Ante cualquier duda, lo más importante es no esperar: una revisión a tiempo evita complicaciones.
Ombligo recién nacido con pus o sangrado: ¿qué hago?
Si el ombligo de tu bebé tiene pus, no lo limpies solo en casa. Llama al pediatra para una evaluación. Si sangra levemente justo cuando se cae, es normal. Pero si el sangrado es constante o se acompaña de enrojecimiento, también debe valorarse médicamente.
El ombligo de mi bebé sangra: ¿es peligroso?
Un pequeño sangrado ocasional justo después de que se cae el cordón es común. Pero si el sangrado es recurrente, abundante o viene con otros síntomas, podría ser señal de un trastorno en la cicatrización o de irritación local. En ese caso, consulta cuanto antes.
¿Cómo curar el ombligo de un bebé recién nacido?
La Dra. Orly Cheirif recomienda:
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Lavar tus manos antes de tocar el ombligo
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Mantener la zona seca y limpia
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No cubrir el muñón con gasas
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No usar alcohol ni productos sin indicación médica
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Doblar el pañal para no rozar el cordón
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Evitar arrancarlo, aunque parezca que va a caer
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Bañar al bebé con normalidad, secando bien el área después
Estos cuidados ayudan a evitar infecciones y favorecen una caída natural y segura del cordón.
Cordón umbilical a punto de caer: ¿puedo hacer algo?
No. Solo observa. Si ves que está colgando o a punto de desprenderse, no intentes arrancarlo. Deja que se caiga solo. Forzarlo puede provocar sangrado o infección.
¿Qué hacer después de que se cae el cordón umbilical del bebé?
Una vez que el cordón se desprende:
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Limpia con agua tibia y seca suavemente
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Observa si el ombligo sigue húmedo o tiene secreción
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Usa ropa de algodón que no irrite
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Continúa doblando el pañal para evitar fricción
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Consulta si aparece un bultito, secreción persistente o mal olor
En algunos bebés, puede formarse un granuloma umbilical, que requiere revisión médica.
¿Cómo se ve el ombligo o el cordón umbilical cuando se cae?
Al caer, el muñón puede dejar una pequeña herida rosada o una costra. Esto es normal. Lo que no debe verse es pus, enrojecimiento alrededor o secreción constante. Un ombligo de bebé sano luce limpio, seco, sin mal olor y sin dolor al tocar.
Ombligo negro, ombligo rojo bebé y otras dudas visuales
Es normal que el cordón se torne negro antes de caerse. También puede verse algo rojizo al inicio. Sin embargo, si el área alrededor del ombligo está intensamente roja o se ve inflamada, no lo ignores. Cada bebé es diferente, pero un ombligo sano no duele ni supura.
Fotos de ombligo de bebé infectado: ¿sirven para comparar?
Pueden ayudarte a tener una idea, pero no sustituyen una valoración médica. Cada bebé cicatriza de forma distinta, y lo que en una imagen parece normal puede no serlo en otro contexto. Si tienes dudas, es mejor acudir a consulta pediátrica.
Bebé recién nacido enfermo del cordón umbilical: ¿qué hacer?
Una infección en el cordón umbilical puede parecer algo menor, pero si no se trata a tiempo puede avanzar. En casos graves, podría derivar en una infección sistémica. Por eso, si ves signos de infección o tu bebé está irritable, con fiebre o inapetente, busca atención médica de inmediato.
¿Cómo amarrar el cordón umbilical del recién nacido?
En realidad, este paso lo hace el equipo médico al momento del parto. Como mamá o papá, no necesitas volver a amarrarlo. Solo debes enfocarte en su cuidado posterior, asegurándote de que no haya presión sobre la zona y que se mantenga limpia y seca.
¿Es malo guardar el ombligo del bebé?
Muchas familias conservan el ombligo como recuerdo, tradición o creencia cultural. Desde el punto de vista médico, no es dañino, siempre que se haya caído naturalmente, esté seco y no presente signos de infección. Si decides guardarlo, asegúrate de almacenarlo en un lugar limpio y seguro.
Un mensaje de la Dra. Orly Cheirif
“Cuidar el ombligo de tu bebé no tiene que dar miedo. Con higiene, observación y cariño, este proceso es sencillo y parte de los primeros vínculos con tu recién nacido. Si algo no te parece normal, no dudes en pedir ayuda. Tu intuición como mamá o papá es poderosa.”
Un cierre para ti
Cuidar el cordón umbilical es una de las primeras experiencias de cuidado que tendrás con tu bebé. Y aunque pueda parecer delicado, con la información adecuada, se convierte en un acto cotidiano de conexión. No necesitas hacerlo perfecto, solo estar presente, mirar con atención y confiar en ti. Si necesitas ayuda, pide orientación. Y recuerda: todo lo que estás sintiendo, desde el miedo hasta la ternura, también forma parte del amor.