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Updated on Julio 13, 2023
Created on Marzo 14, 2023
La lactancia es un momento que requiere paciencia, energía y conocimiento para ser una experiencia placentera y como nos interesa ir contigo de la mano en tu maternidad, quisimos platicar con una experta para darte información útil que te dé seguridad. Platicamos con la licenciada en nutrición, Orly Levinstein, ella es asesora en lactancia y, además de todo su conocimiento académico y su experiencia en el consultorio, su perspectiva está llena de empatía porque es mamá de 3.
Con su visión, esperamos que sea más fácil para ti comprender todo lo que debes saber para los primeros días de lactancia. De este modo, pegarte a tu bebé será un momento de conexión, en el que fortalecerán el vínculo mamá/bebé sin dolor para ti y con mucho amor para él.
“Los primeros días de lactancia pueden ser un poco pesados, vamos a tener un bebé demandante, lo que es completamente normal”, Levinstein, a quien encuentras en Instagram como orly_nutrifeed (https://www.instagram.com/orly_nutrifeed/), nos está diciendo algo que, aunque podamos imaginar, el vivirlo es más intenso.
“Tenemos a un bebé que su capacidad gástrica es muy pequeña, le cabe muy poquito calostro, que es lo que tenemos al principio”, esto significa que, el bebé necesitará tomas constantes, “vamos a tener un bebé que va a querer comer muy frecuente y esto es algo completamente normal”.
Según nuestra experta en lactancia, el bebé debe tener de 8 a 12 tomas de leche (calostro) en 24 horas, “el bebé tiene que comer mínimo 8 veces al día”. Sin embargo, la especialista hizo énfasis que cuando el bebé quiera leche, se le debe dar, “la lactancia siempre debe ser a libre demanda… Cada vez que el bebé quiera hay que ofrecerle el pecho y que coma”.
Orly nos explicó que existen factores que determinan que un bebé necesite constantemente de la leche materna, “los bebés comen poquito, el estómago se vacía rápido y la leche materna se digiere muy rápido, de 30 a 90 minutos, sí va a ser muy común un bebé que quiera comer seguido”.
Algo con lo que se debe tener muy cuidado durante los primeros días de la lactancia en el agarre, “si está bien agarrado es lo que nos va a ayudar a que el bebé pueda sacar bien la leche, que mamá no esté lastimada y que todo vaya por buen camino”.Pero si te estás preguntando cómo es un buen agarre, la especialista nos explicó la técnica para lograrlo, no sin antes decirnos cuándo no es un buen agarre.
“Lo que no queremos es que agarre el pezón, justamente, si agarra el pezón está mal agarrado… Si sólo agarra el pezón va a tapar la salida de la leche”, explicó, “es como cuando agarramos un popote y mordemos la punta, no vamos a dejar que salga lo que está en el vaso”, añadió.
Un buen agarre, además de representar que el bebé pueda succionar la leche, ayudará a que la mamá no tenga una lactancia dolorosa. “Lo que queremos es que el bebé abra grande la boca”, la abertura de la boquita del bebé es uno de los principales elementos de un buen agarre. Para tener una buena técnica de agarre, la especialista recomienda lo siguiente:
“pasen el pezón de mamá de la nariz a la boca del bebé, para que el bebé empiece a buscar; sienta, huela la leche, abra la boca y en ese momento lo llevamos al pecho”. La doctora Orly nos platicó que además de la comisura de la boca bien abierta, se necesita que el bebé tenga los labios evertidos, es decir, para afuera y la nariz y barba estén pegados al pecho, “eso va a hacer que no nos duela, justamente el pezón no queda en los labios, el pezón queda en la parte del paladar blando del bebé”.
“Una lactancia que está bien, que el bebé está acomodado bien, que tiene buen agarre, que la mamá tiene buena posición, que bebé tiene buena posición no debe de doler”.
Esta es una invitación a que si mientras amamantas, tienes dolor, revises si la técnica que estás teniendo con tu bebé es la adecuada o no. “Sí puede, al principio lastimar, los primeros 10-15 segundos de la toma, es común que mamá sienta cierta molestia pero que esa molestia pase, si te duele de que no puedes hablar del dolor que tienes o que estás agrietada, esto ya no es normal”, explicó la doctora.
“Cuando duele es porque el bebé se agarra del puro pezón… O cuando el bebé tiene frenillo corto sublingual”, además de estas condiciones, una infección como la candidiasis pueden provocar dolor al amamantar.
Otra duda que surge con respecto a la lactancia es saber si el bebé está ingiriendo la cantidad de leche que necesita. Al respecto, nuestra especialista nos mencionó que una señal de que está ingiriendo la suficiente leche materna es la cantidad de pipí que hace. “En las primeras 24 horas de nacido, el bebé debe hacer un pañal de pipí; el segundo día, es decir, segundas 24 horas; 2 pañales; tercer día, 3 pañales; cuarto día, 4 pañales; quinto día, 5 pañales, a partir del quinto día de nacido, el bebé tiene que hacer entre 5 y 6 pañales al día y con eso nosotras podemos estar tranquilas”, explicó.
Lo que también es una buena señal es tener un pañal de popó de las 0 a las 6 semanas, añadió la especialista, “a partir de las 6 semanas esto puede cambiar un poco, los bebés pueden estar mucho tiempo sin hacer popó y esto también es normal”. En caso de que el bebé no estuviera tomando la cantidad de leche adecuada, estaría deshidratado y la principal señal de que el bebé está deshidratado es que no hace pipí.
Por otro lado, se habla mucho acerca de que un bebé debe comer cada 3 horas, al respecto, la doctora mencionó que si el bebé no pide de comer, tienes que darle, “si no te pide en 3 horas, tienes que despertarlo y pegártelo, no dejar que pasen más de 3 horas”. Durante el primer mes de vida, es importante ser puntuales con las tomas de leche pues podría bajarle su nivel de azúcar en sangre.
“No hay leche materna mala… La leche en general de todas las mamás es el alimento perfecto para su bebé”, aclaró Orly, pues existen muchos mitos alrededor de la calidad de la leche materna. ”Eso de que tu leche no es buena, es una mentira terrible que atormenta”, explicó la licenciada en nutrición, “cada leche de cada mamá de cada bebé es perfecta para ellos”. Incluso, nos explicó que, aún si la mamá estuviera llevando una dieta restrictiva, su leche será ideal para su bebé, “si la mamá no lleva una dieta correcta, puede afectar la nutrición de mamá, pero la leche siempre va a ser perfecta, el cuerpo siempre le va a dar prioridad a la leche de mamá y no al estado de salud de mamá”. Por esto es importante cuidar a mamá para que su estado de salud no se vea afectado.
Con respecto al calostro, la experta nos platicó que todas las mamás lo producen, “hay que aclarar, todas las embarazadas tienen calostro desde la semana 16 de gestación”, mencionó la experta para comenzar a hablar de la diferencia entre el calostro y la leche materna. “El calostro es la primera leche que va a aparecer en mamá”, a veces no es percibido porque sale en una cantidad muy baja. Orly nos explicó que al principió los bebés sólo llegan a tomar 5 mililitros por toma en los primeros 2 días.
Además, su consistencia es pegajosa y difícil de sacar, “si una mamá se pone el extractor el día que nace su bebé, probablemente no podrá sacar nada, porque el calostro no sale tan fácil”. “Al calostro lo llaman la primera vacuna”, agregó la asesora en lactancia, “va a ayudar al bebé a darle ese shot de anticuerpos y de todo lo que necesita para empezar en su bienvenida al mundo”. “
Es un líquido que no hay que desperdiciar y debemos de saber que está ahí y hay que dárselo al bebé. Ese calostro dura de entre 3 y 5 días”, explicó Levinstein. En estos 3 a 5 días ocurre un acto de la naturaleza que es asombroso, baja la leche, “es el cambio de calostro a leche”. Ya la vamos a empezar a ver un poco más blanca, va a empezar a salir en mayor cantidad”, puntualizó Orly.
“La leche materna se forma de la sangre”, explicó la doctora que, lo que la mamá consume es metabolizado por su cuerpo y así, los nutrimentos llegan a su sangre, que es de donde se forma la leche. Para la Organización Mundial de la Salud (https://apps.who.int/nutrition/topics/exclusive_breastfeeding/es/index.html) (OMS), la leche materna es la primera comida natural para los bebés, por lo tanto, aporta toda la energía y los nutrientes que necesitan en sus primeros meses de vida.
Al respecto, la especialista explicó que no es que si come algo picante, le pase eso al bebé por medio de su leche, sin embargo, el bebé puede presentar alergias a ciertos elementos que componen la alimentación de mamá. “La alergia principal en los bebés, es la alergia a la proteína de la leche de vaca, que está proteína la encontramos en todos productos lácteos y en muchos más”, si el bebé presenta esta alergia, la mamá debe dejar de comer alimentos que contengan esta proteína.
La alergia se manifiesta con sangre en popó y síntomas generales de alergia como dermatitis, ronchas y ojos cerrados, por lo tanto, es recomendable asistir con el pediatra. “Del 3 al 5% de los bebés tienen esa alergia, entonces tienen 95 % de posibilidad que no la tengan”, añadió la doctora para dar un poco de calma debido a que es poco común que los bebés presenten esta alergia. Señaló que es importante que la mamá consuma una dieta completa y balanceada, “no empieces con restricciones si tu bebé está perfecto”.
Otro tema que suele ser acompañado de cierta polémica es la ingesta de medicamentos y café de las mamá lactantes, “lo que llega directo a la sangre pasa a la leche, hay que tener cuidado”. Acerca de este tema, Orly Levinstein nos compartió que, sí hay ciertos medicamentos que no deben ser consumidos por la mamá que está dando pecho, sin embargo, otros son inofensivos, “hay que checar la lista de medicamentos que son compatibles con la lactancia que son muchísimos” Con respecto a la cafeína, no es que esté prohibida, sino que debe consumirse con moderación, “dos tazas al día para una mamá lactante está bien”.
El alcohol tampoco está completamente prohibido sólo se trata de no excederse y de esperar que pase tiempo antes de amamantar. “El alcohol pasa directamente a la sangre, entonces, lo que tienen que hacer las mamás que toman es dejar pasar periodos de tiempo para que el cuerpo solito metabolice ese alcohol”. La recomendación es que si las mamás se toman una copa de vino o un caballito de alguna bebida, dejen pasar de 2 a 3 horas antes de dar pecho.
Uno de los mitos que acompañan a la lactancia es el de tomar cerveza para aumentar la cantidad de leche materna. Sin embargo, la experta aclara que no hay alimento o bebida que beneficie la eyección de leche, “no se ha encontrado que ningún alimento, suplemento, ayude a aumentar la producción de leche”. “Lo único que va a servir es la succión y la estimulación por parte del bebé”, enfatizó la doctora Orly.
Orly es asesora en lactancia, así que domina perfecto lo que puede ayudar a una mamá y a su bebé a vivir juntos la lactancia de forma satisfactoria. Por ello sabe que, hay un principio básico, “si el bebé ya no se está pegando al cuerpo, entonces, el cuerpo va a entender: necesito bajar la producción de leche, entonces va para abajo. Si tenemos un bebé que se está pegando constantemente, el cuerpo dice: me están pidiendo más necesito aumentar”. Es decir, el contacto entre el bebé y el pecho de la mamá es fundamental para entender las necesidades de cada uno.
Orly nos platicó que a sus pacientes les explica que la Organización Mundial de la Salud recomienda (https://www.who.int/features/factfiles/breastfeeding/facts/es/) seis meses de lactancia exclusiva y dos años o más de lactancia prolongada, sin embargo, es una decisión que cada mamá deberá tomar con libertad.
“Yo siempre les digo que mamá debe de lactar hasta que ella esté cómoda, hasta que ella quiera”, enfatizó Orly con mucha empatía y añadió que un bebé decide destetarse hasta los 3 o 4 años. Este tiempo de lactancia puede estresar a las mamás y, ella, como experta, no lo cree necesario. “Cuando lo dejen de disfrutar, cuando ya no estén contentas, cuando ya no quieran, ese sería un buen momento para destetar”, finalizó Levinstein.
Para la experta, la participación de la pareja no está limitada, “el papá debe estar involucrado desde el embarazo en todos los temas, que sepa qué es lo que va a pasar”. “Que se informen juntos, como pareja, para que cuando la mamá empiece ‘no estoy tan bien, voy a tirar la toalla’, el papá diga, ‘oye, acuérdate, esto va a pasar y luego va a ser así… La información y el apoyo de papá ayuda muchísimo a las mamás”, agregó la especialista en lactancia. Entonces, si estás lactando o próximamente llevarás a cabo esta actividad, recuerda que nadie te obliga a nada. Lo importante es que tanto tú como tu bebé gocen del momento y construyan recuerdos que los unirán toda la vida.
